1.- Chocolate: debe evitarse totalmente porque contiene teobromina que es un compuesto químico del tipo alcaloide, muy similar a la cafeína (así que el café y el té también son malos para ellos), por lo que es estimulante del sistema nervioso central y acelera el corazón. Les puede provocar vómitos y diarreas que les producen deshidratación y úlceras, les acelera el ritmo cardiaco y en dosis suficientemente altas los puede dejar ciegos e incluso matarlos.
2.- Cebollas, cebolletas, cebollinos, puerros y ajos: todos son tóxicos por su contenido en tiosulfato que es difícil de procesar por nuestras mascotas y les daña los glóbulos rojos de la sangre, puede incluso destruirlos. Eso les provoca anemia, debilidad, apatía, poco interés en la comida y vómitos.
3.- Sal, azúcar o bicarbonato: pueden causarles problemas renales e hipertensión. Incluso los restos de sal de nuestras comidas cuando les damos las sobras pueden ser peligrosos, en grandes cantidades les puede provocar falta de coordinación, convulsiones y edemas cerebrales.
4.- Uvas y pasas: puede causarles insuficiencia renal que les provoca la muerte en poco días (3-4 días), incluso el consumo de sólo 6 uvas ya tiene efectos negativos como diarreas.
5.- Aguacate: es muy peligroso por la sustancia persin. Toda la planta del aguacate es peligrosa, la semilla, el fruto, la corteza, las hojas... Puede provocarles problemas gastrointestinales y dificultad respiratoria.
6.- Las pepitas de muchas frutas como las manzanas, los caquis, los melocotones y las ciruelas: contienen cianuro y otras sustancias tóxicas que les provocan convulsiones, dificultad respiratoria e incluso la muerte. El aceite esencial de los cítricos también es peligroso para los gatos.
7.- Leche y lácteos: ahora que llega el verano hay que tener cuidado con los helados porque los perros y gatos adultos son intolerantes a la lactosa y tomarla les puede provocar vómitos, diarreas y otros problemas digestivos.
8.- Alimentos grasos y huesos: los alimentos ricos en grasas pueden provocarles vómitos y diarreas. Los huesos (o espinas de pescado) pueden provocar daños en el aparato digestivo, pueden romperles dientes, lesionar las encías, pegarse al estómago e intestinos (o perforarlos) produciendo graves hemorragias.
9.- Carnes, pescados y huevos crudos: pueden tener bacterias que les causen intoxicaciones alimentarias.
10.- Tomate: la tomatina y solanina que contienen son tóxicas para ellos, puede dañarles tanto el sistema digestivo como el nervioso y también los riñones. Tendrán vómitos, diarrea, temblores, convulsiones, problemas respiratorios, arritmias cardiacas... Para los gatos en general, las verduras no son buenas.
11.- Alcohol: como ellos tienen un metabolismo más rápido que el nuestro, no procesan bien el alcohol, lo absorben rápidamente y pasa al torrente sanguíneo así que en pequeñas dosis ya es letal. Empezarán con incontinencia urinaria, vómitos, se pondrán muy nerviosos y agresivos, pueden llegar a atacar o incluso herirse a sí mismos. ¡Así que nada de hacer la típica bromita de darles cerveza!
12.- Nueces y nueces de macadamia: contienen toxinas que afectan al sistema nervioso, afecta a los músculos causando debilidad y rigidez en las patas. ¡Así que mucho cuidado con algunas galletas o alimentos así!
13.- Xilitol: es un edulcorante de uso muy común en pastas de dientes, enjuagues bucales, chicles, dulces, panadería industrial e incluso algunos medicamentos para la tos. Es muy peligroso para nuestras mascotas porque les produce un peligroso aumento de insulina en sangre y por tanto, una rápida caída de los niveles de glucosa; esa hipoglucemia y también la insuficiencia hepática que es otro de los efectos, puede provocarles la muerte. Los primeros síntomas son vómitos, debilidad, cansancio, dificultad para caminar y para estar de pie, temblores y convulsiones. ¡Mirad bien las etiquetas de los alimentos para aseguraros de que no contienen este producto tan tóxico!
Si buscáis por internet veréis que hay algunos alimentos más, así que para estar seguros de que no hacéis daño a vuestras mascotas, lo mejor es que les deis alimentos fabricados para ellos (al gato comida para gatos y a los perros las de perros, porque tampoco es bueno darles lo mismo...) en lugar de nuestras sobras porque contendrán los nutrientes que necesitan y nada que les pueda hacer daño. ¡Y por supuesto siempre hay que seguir las recomendaciones de sus veterinarios!
La Comisión AYA.
